¿Tienes dudas sobre la inseminación artificial? Éste es uno de los tratamientos de reproducción asistida más populares y ha mejorado mucho gracias a los avances médicos actuales. Sin embargo, sabemos que necesitas procesar mucha información antes de elegir este tratamiento.
También entendemos que la transparencia y la información son fundamentales para iniciar un tratamiento con total tranquilidad y confianza. Por esta razón, compilamos 8 datos interesantes y preguntas frecuentes sobre la inseminación artificial (IA) que seguro te ayudarán en tu decisión.
Las siglas IIU significan inseminación intrauterina, uno de los tratamientos de fertilidad más comunes, que consiste en depositar los espermatozoides (previamente capacitados y seleccionados en el laboratorio) dentro del útero para aumentar la probabilidad de embarazo.
Existen dos tipos de Inseminación artificial y ambos procedimientos son muy similares:
La IA una técnica de reproducción asistida poco invasiva, sencilla y relativamente rápida, considerada de baja complejidad. Durante el proceso pasamos un catéter a través del cuello uterino, donde se encuentran los espermatozoides previamente capacitados que introducimos en el fondo del útero, en un día especifico recomendado por el médico especialista.
Aunque puede causar cierta incomodidad, principalmente cuando se pasa el catéter a través del cuello uterino, la inseminación es un procedimiento relativamente indoloro. Algunas mujeres lo han comparado con un examen de Papanicolau en términos de malestar.
La muestra de semen puede recolectarse en casa, aunque generalmente se recolecta en la clínica de fertilidad. En ambos casos, el hombre recibirá un pequeño recipiente estéril donde depositará la muestra seminal. Cuando se realiza en casa, debe entregarse la muestra al laboratorio máximo 1 hora después de la eyaculación.
En la clínica realizamos una capacitación espermática antes de realizar el tratamiento. Este proceso consiste en seleccionar los espermatozoides más aptos, eliminando bacterias, espermatozoides muertos o lentos, glóbulos blancos y otros elementos del semen durante el proceso de selección espermática con el objetivo de aumentar las posibilidades de embarazo.
Al igual que la FIV, el porcentaje de éxito en inseminación artificial depende de varios factores. En algunos casos después de hacer una evaluación médica y física el especialista en fertilidad puede recomendar utilizar de 2 a 4 intentos para aumentar las probabilidades de embarazo.
Si no se obtiene el resultado esperado tras realizar las IAs recomendadas por el médico especialista, se debe considerar la fecundación In Vitro.
Con una estimulación ovárica muy leve impulsamos el éxito del tratamiento. Además, realizamos un espermograma previo al tratamiento, analizando la calidad el semen de la pareja para determinar si la inseminación es la más correcta dentro de las otras técnicas de fertilización In Vitro existentes.
Recomendamos hacerte la prueba de embarazo 14 días después del procedimiento. La implantación del embrión concebido en tu útero puede tardar entre seis y 12 días después de la ovulación, por lo tanto, es mejor esperar dos semanas después del procedimiento y hacerte la prueba de embarazo en sangre.
Siéntete libre de levantarte y moverte después de la inseminación. En realidad, puedes reanudar tus actividades regulares de inmediato, siempre y cuando éstas no impliquen un esfuerzo físico excesivo.
Descubre más datos interesantes y otras preguntas frecuentes dando clic aquí. También te invitamos a conocer los mitos y realidades más comunes sobre la infertilidad a continuación.
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